
La esperada versión en acción real de Blanca Nieves ha sido uno de los estrenos más polémicos en la historia reciente de Disney.
Desde el anuncio del elenco hasta su estreno internacional, la cinta ha estado en el ojo del huracán, especialmente por la elección de Rachel Zegler como la protagonista.
Zegler, actriz de raíces latinas y reconocida por su papel en West Side Story, fue objeto de intensas críticas por parte de sectores conservadores que esperaban una imagen más “tradicional” de la princesa, descrita en el cuento original como “de piel tan blanca como la nieve”.
Sin embargo, lo que realmente encendió la mecha fueron las declaraciones de la propia Zegler, quien aseguró que esta nueva versión presentaría una Blancanieves más independiente, que no necesitaba ser salvada por un príncipe.
Las redes sociales explotaron, acusando a Disney de ser “demasiado woke” y de alejarse innecesariamente de los elementos clásicos del cuento. Esto llevó al estudio a replantear su estrategia promocional, reduciendo la presencia mediática de Zegler y optando por un estreno más reservado en Europa, concretamente en el Alcázar de Segovia, España, lugar que sirvió de inspiración para el castillo de la princesa en la versión animada de 1937.
Sin embargo, nuevos rumores han salido a la luz: al parecer, antes de confirmar a Zegler, Disney habría considerado a otras actrices con un perfil más cercano al arquetipo clásico de Blancanieves. Incluso se especula que, tras las controversias, el estudio valoró un posible recast, aunque esto nunca se confirmó oficialmente.
Voces cercanas a la producción aseguran que las tensiones internas estuvieron presentes desde las primeras pruebas de cámara.
Pese a todo, la película logró estrenarse, aunque su recepción en taquilla ha sido tibia. Muchos se preguntan si el ruido mediático afectó su rendimiento o si simplemente la audiencia ya no conecta con los remakes en live-action.
En medio del debate, una cosa queda clara: Blanca Nieves ya no es solo un cuento de hadas, sino un reflejo de las tensiones culturales y sociales de nuestro tiempo.