
Las tensiones comerciales entre Estados Unidos y Canadá han alcanzado un nuevo nivel con la electricidad en el centro del conflicto.
El gobernador de Ontario, Doug Ford, impuso un recargo del 25% en el precio de la electricidad exportada a Nueva York, Michigan y Minnesota, afectando a 1.5 millones de hogares y empresas.
Esta medida responde a los aranceles del 25% que el presidente Donald Trump anunció contra productos canadienses el 4 de marzo. Aunque Trump luego aplazó las tarifas por un mes, Ford decidió mantener el recargo eléctrico, advirtiendo incluso que podría cortar el suministro por completo si la tensión escala.
Más allá del choque político, la pregunta clave es: ¿cuánto depende EE.UU. de la electricidad canadiense y qué pasaría si se interrumpe el suministro? ⚡